La Casa Oryza está situada en el pueblo de Arnes, en medio de un campo de olivos.

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Es la primera edificación de un proyecto que explora la sostenibilidad y la bioconstrucción para conseguir una arquitectura respetuosa con el medio ambiente, con un bajo consumo energético, saludable y asequible.

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La vivienda recibe el nombre genérico de la planta de arroz (Oryza) porque se ha utilizado su cáscara como material de construcción en el aislamiento de todos los cerramientos. Éste producto agrícola se ha adquirido, por motivos de proximidad, a las cámaras arroceras del Delta del Ebro.

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La vivienda produce su propia energía con un sistema de generación fotovoltaica. La Casa Oryza genera más energía de la que necesita.